UNA VEZ ELEGIDA LA VIVIENDA
Si ya dieron con la “casa (o departamento) soñada(o)”, vienen la etapa de los trámites. Primero se concreta la elección con la firma de un documento legal, que puede ser una promesa de compraventa o un cierre de negocio. Esto trae también el pago de la reserva y/o el pie, y que va a depender de la etapa en que se encuentre el proyecto. Para inmuebles nuevos, se tiene la opción de pagar una reserva y luego pactar un pago en cuotas por el total del pie. Normalmente, en estos documentos viene incluida una cláusula que resguarda a ambas partes (comprador y vendedor) si es que alguien se arrepiente del negocio, básicamente establece el compromiso de llevar a cabo la transacción, imponiendo multas a las partes responsables si no ocurre.
El siguiente paso es el otorgamiento del crédito desde la institución bancaria, quienes solicitan la tasación de la propiedad y, posteriormente, se realiza la escritura de compraventa. Con este documento, se inscribe el inmueble en el Conservador de Bienes Raíces a nombre del nuevo dueño. El plazo de toda esta tramitación es variable, pudiendo ir desde los tres a seis meses.
ELEMENTOS A CONSIDERAR
La toma de decisión puede variar por aspectos que no están solamente relacionados con la construcción, sino que de elementos más propios del comprador, como por ejemplo, la ubicación por la cercanía o no del lugar de trabajo o colegio de los hijos, la plusvalía y la accesibilidad.
Finalmente, la compra de una propiedad es un paso importante y puede convertirse en una inversión. Por ello, es recomendable siempre mantener la propiedad en óptimas condiciones. Cabe señalar que la Cámara Chilena de la Construcción tiene una tabla que indica cada cuánto tiempo se deberían realizar mantenciones de la propiedad en el Manual de Uso y Mantención de la Vivienda. Revisar aquí: https://issuu.com/camaraconstruccion/docs/manual_de_uso_y_mantencion_de_la_vi